Después
de comulgar es el momento,
habiendo
recibido a mi Señor,
cerrando
yo los ojos de mi cuerpo
y
abriendo los del alma, mirarme al corazón
y
allí encontrarme con Él,
allí
entregarme todo a Él,
dejándome
mirar
y
contemplándole
y
allí encontrarme con Él,
allí
entregarme todo a Él,
mirando
en lo profundo de sus ojos
sabiendo
que le tengo en mi interior
Con
ojos tan hermosos y piadosos
en
penas y alegrías Tú me miras
Concédeme
la gracia de mirarte
Y
abriéndote mi alma, mirar tu corazón
Y
allí encontrarme contigo,
Allí
entregarme todo a Ti,
dejándome
mirar
y
contemplándote
y
allí encontrarme contigo,
allí
entregarme todo Ti
mirando
en lo profundo de tus ojos
sabiendo
que te tengo
en
mi interior
Juntos
andemos Señor
allí
por donde vayas yo iré
juntos
andemos Señor
allí
por donde pases, pasaré.
sabiendo
que me miras y mirándote
